Y despacio es como está yendo la
asimilación de costumbres, sitios, lenguajes y hábitos dentro de
este espacio.

Así, para hacernos una vaga idea, si
uno se pusiese justo en el centro geográfico de este kilómetro
cuadrado la distancia más corta al límite sería de unas diez
piscinas olímpicas. Con tan solo recorrer cinco veces su perímetro
más un lado cubriríamos prácicamente la distancia de una media
maratón. Vamos, que es muy grande.
Desde que crucé la puerta de entrada
no he vuelto a salir del recinto. Decir puerta es meramente una
formalidad porque lo que delimita el lugar es un par de verdes
arbustos de unos tres metros de alto, separados entre sí como unos
seis metros, que trazan una línea imaginaria que hace las veces de
barrera, cancela, muro. Pero quizás es mucho más que eso. Quizás
la imaginaria barrera no es solo geográfica sino temporal. Dentro
del recinto disponemos de energía eléctrica, producida por placas
solares, y agua corriente, extraída del pozo existente en en subsuelo
por medio de unas bombas eléctricas, con estas dos cosas
prácticamente accedemos a todas las comodidades a las que estamos
tan habituados. Lavadora, grifos, duchas, microondas, neveras,
plancha, internet.. en fin. No muy distinto a un entorno rural
cualquiera de nuestra península. Es más, conozco sitios donde ni
siquiera existen estas comodidades dentro de nuestra piel de toro.


Las payotas, chozas, casas de adobe o
barro son muy dignas, dentro de lo que puede dar de sí la palabra
dignidad dentro de la situación. Están limpias y cuidadas y aunque
la pobreza es patente la miseria no está presente.
Pero esto les (nos) situa en algunas
décadas atrás, si no en algún siglo. Con lo que aquí el viaje en
el tiempo es posible. Tan solo hay que cruzar una línea imaginaria
trazada por unos verdes arbustos.
La intención era contar la vivencia de
la primera semana en esta entrada, sin embargo ya ha pasado más de
una semana, más bien dos, desde que llegué y como quiera que ya he
tenido oportunidad de salir voy a contarlo por partes, así que,
publico esta entrada, también para no tardar mucho entre publicación
y publicación, y sigo con la adaptación en la siguiente.
Hola Javier, ni te imaginas el gusto que me dio saber de nuevo de ti, mas aún ver la aventura en la que te has envuelto, necesitas contarnos más, es que no encuentro la finalidad de tu viaje, ¿me cuentas más por favor? Seguramente es algo muy positivo.
ResponderEliminarBuenos dias, Javier
ResponderEliminarAqui en el "primer" mundo vemos como normales e imprescindibles cosas que allí solo están a disposición de unos cuantos "privilegiados". Te dejan sin luz unas cuantas horas y parece que se acaba el mundo.
Supongo que los de "aqui" nos podriamos contentar con mucho menos de lo que tenemos para que los de "allí" tuvieran un poco más de lo que tienen,pero nuestra sociedad esta erigida como está y nos va a costar mucho poder cambiarla si es que algún día podemos. Será una labor para nuestros hijos, o nietos..... la nuestra ya es una generación acomodada y no le veo ganas de cambiar el mundo....
Muy buenas fenómeno, nos alegramos de que todo te este yendo bien, aunque por la poca experiencia que tengo seguro que estos primeros días te estén siendo un poco durillos. Te animamos a que nos sigas escribiendo tus experiencias y vivencias, te seguimos desde Córcega Izaro y yo.
ResponderEliminarMuchos besos y animo.
El tolosarra.
Hola Javier:
ResponderEliminarPor las fotos y lo que cuentas veo que aquello al menos es muy, pero que muy tranquilo. La ventaja que tiene, por decir algo, es que supongo te transmitirá tranquilidad y paz interior sabiendo que al menos estas haciando algo positivo prestando tu ayuda desinteresada a esa gente que lo necesita y mucho. Por aqui todo sigue igual, por decir algo, ayer nos juntamos en la plaza del Azuelo para tomar un pote y cenar algo en el Bábaros. Te recordamos todos siempre con mucho cariño. Un abrazo y te animo a que nos sigas contando tus experiencias.
Yo también te animo a que nos sigas contando todo y esperando con ganas a ver cómo va esa adaptación.
ResponderEliminarMucha fuerza y un abrazo
Muy buenas Javi:
ResponderEliminarVeo que ya eres uno más por allí... Las fotos que pones dan una clara idea de lo que comentas. Ya ves, aquí nos sobran un montón de cosas y allí... Por cierto, no lo has comentado, seguro que se te ha pasado por alto sin darte cuenta.... ¿¿¿Hay pista de Pádel??? jajaja.
Venga un fuerte abrazo y ánimo campeón.
Qué bien te explicas. Un abrazooooooooooooooo
ResponderEliminarhola Javier, qué envidia!!!!.
ResponderEliminarMucho ánimo y sigue escribiendo que lo haces muy bien. Besos, Miren.
Javier!!! que gusto da leer tus impresiones,ánimo!sigue contándonos,si?.Te cuento que el viernes pasado estuvimos unos cuantos dándonos reiki,y acabaron filosofando sobre la felicidad , ya sabes....Santi, Mirentxu,Rogelio, Yolanda y por supuesto Diego .
ResponderEliminarTe eché de menooooossssss!!!!!
Sigue disfrutando y compartiéndolo con todos, un abrazo goxo,goxo
Ana Donaire
SIgue escribiendonos Javier.
ResponderEliminarEspero que toda la energia del mundo esté allá donde estás para que puedas disfrutar de esta experiencia.
Un abrazo. Iñaki Zabala